Aquí os dejo la receta de la otra tartita que hice para el día de mi cumple. En principio ésta era la que tenía pensado dejar para los amigos, pero al final tuve que poner las dos, por petición popular.
En esta receta pude hacer muy pocas fotos por falta de tiempo, y tampoco pude hacer una de ella ya desmoldada.
Hacía mucho tiempo que no hacía esta tarta, pero salió perfecta!
INGREDIENTES:
- 4 Huevos.
- 2 Limones.
- Mantequilla.
- 120 gr. de Harina.
- 1 cucharada de Maizena.
- 2 cucharadas de Azúcar y agua, para el almíbar.
- 1 lata pequeña de Leche condensada (yo compré una desnatada y no se nota nada la diferencia).
- Empezamos haciendo el almíbar. Para ello, lavamos bien un limón y lo pelamos, con cuidado de que no nos llevemos piel blanca, que es lo que le da el amargor. La metemos en una cazuela, con las dos cucharadas de azúcar y el agua, y lo dejamos cocer 10 minutos. Colamos y reservamos.
- Para la masa quebrada, mezclamos la harina, una yema de huevo, una nuez de mantequilla y la rayadura de un limón. Amasamos con las manos y hacemos una bola. La tapamos y dejamos reposar unos 30 minutos.
- Vamos haciendo el relleno. Echamos en un cazo, el almíbar de limón, y añadimos la maizena. Diluimos bien. Vamos echando una a una, las 3 yemas de huevo. Hacemos el zumo de dos limones y se lo añadimos también. Una nuez pequeña de mantequilla y la leche condensada. Lo ponemos al fuego, sin dejar de remover hasta que espese. Lo retiramos y reservamos.
- Estiramos la masa quebrada y, una vez engrasado un molde desmoldable, la colocamos sobre él. La pinchamos con un tenedor para que no se hinche en el horno, y la metemos hasta que esté dorada.
- Cuando esté lista, la sacamos del horno y echamos la crema encima.
- Montamos 3 claras de huevo a punto de nieve, bien firmes. Las ponemos por encima de la crema y lo horneamos de nuevo. Esta vez, solo para gratinar el merengue. Sacar y dejar enfriar.
- Desmoldar y rallar un poquito de piel de limón por encima.
- Listo y ¡a comer!
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